martes, 16 de julio de 2013

Crusaders of the Amber Coast (Sesión 17)

 Verano-Otoño de 1237

Extracto de la carta enviada por Dietrich von Gruningen, Ostmeister de Livonia, a su superior Hermann von Balk, Ostmeister de Prusia:

(…) De modo que tomé la resolución de marchar de Riga, rumbo a la encomienda de Welden, desde hace años sede de la Hermandad de la Espada, y donde aún no he estado, debido a todos los asuntos que me han retenido junto al Obispo Nicholas. Para tal viaje debía llevar una comitiva adecuada, así que veinte hermanos teutones partieron conmigo, además de numerosos hombres de armas laicos, y criados suficientes como para mantener nuestras necesidades.

Pensé que podría aprovechar el viaje para poder ver con mis propios ojos las fortalezas que cubren el Río Daugava, verdadera frontera natural que defiende a los livonios de los belicosos lituanos. Antes de nuestra partida, numerosos cruzados recién llegados a estas tierras se unieron a nosotros, entre ellos un monje franciscano, el Hermano Peter, que afirmó haber llegado hasta este lugar en un intento de salvar las almas de los paganos.
En nuestro periplo pasamos revista a las fortalezas de Holm, Uekskull y Lennewarden, antes de llegar hasta Ascheradan, la encomienda que está bajo el mando del joven Hermano Adam, como ya os expliqué anteriormente.

Una vez en aquel lugar, fuimos recibidos con toda la hospitalidad de la que pudieron hacer gala en aquella humilde encomienda. No pasamos más de dos días allí, para no causar un exceso de daño en las arcas de la fortaleza.

Según pude comprobar personalmente, las obras del castillo de piedra se encuentran en un estado muy avanzado, a pesar de los problemas que, como me contó el komtur, habían hecho peligrar su finalización. Los continuos ataques contra la obra y los trabajadores, hechos según los designios de alguna bruja pagana, adoradora de Satán sin duda, supusieron la puesta en peligro de las vidas de los hombres que trabajaban en la edificación de la fortaleza, además de numerosos daños valorados en una cuantiosa cantidad de plata.

Además de las incursiones, la fortaleza de Ascheradan sufrió la presencia de un tipo de diablo o criatura infernal, a quien los nativos dan el nombre de pukis. Estos seres tienen la semblanza de dragones, pero sin ser más grandes que un gato. A pesar de su reducido tamaño, me explicó el Hermano Adam, el pukis se volvió un problema cada vez peor, pues es capaz de respirar fuego, y su astucia es tan grande como su malignidad. Cometió actos de sabotaje, valiéndose de la noche y del fuego que puede respirar por sus narices, haciendo caer la grúa y el andamio que los obreros levantasen para ayudarse en la obra.

Finalmente, pudieron atrapar a la bestezuela demoníaca en una emboscada, en la que, si bien el Hermano Adam no me lo dijo con esas palabras, yo pensé que debía de haberse ayudado de la bruja pagana Tekla, que le acompaña a todas partes, y en quien parece confiar más que en un buen sacerdote cristiano.

Zemvaldis, el auxiliar de Adam, fue quien, con su astucia, ha logrado la mayor cantidad de los dineros necesarios para pagar la fortaleza. Si todo va bien, puede que en menos de dos años después de recibir el encargo, Ascheradan por fin goce de la protección de un castillo de buena piedra que la defienda de los incursores lituanos, además de servir como base desde la que enviar nuestros propios ataques en esta cruzada.

El Hermano Adam me solicitó de nuevo un capellán para la fortaleza. No es el único necesitado de sacerdotes, razón por la que os pido reunáis aquellos que os sea posible, o que os lleguen desde las encomiendas germanas o italianas, y que les hagáis embarcar hacia tierras livonias, donde la necesidad de su auxilio espiritual es grande.

Pero entonces fue cuando el monje franciscano Peter se ofreció voluntario para velar por las almas de los habitantes de Ascheradan, hasta que un hermano capellán pueda ocupar el puesto. Quedé sorprendido por su oferta, pero no encontré motivos para negar a aquellas pobres gentes el alivio de los ritos de nuestra verdadera fe. Así que, cuando partimos de Ascheradan, el franciscano quedó allí.

Puede que sea para bien. Ya comienzan a alzarse voces que susurran sobre la excesiva permisividad que el komtur tiene para con los paganos. Hay incluso rumores de su alianza con brujas, que piden por buen tiempo y buenas cosechas a sus falsos dioses, todo ello con el beneplácito de Adam. No hago caso a esos rumores, pues sé que hubo muchas envidias cuando el Hermano Adam se convirtió en komtur de Ascheradan. Pero si tales rumores persisten, mucho me temo que deberé iniciar una investigación al respecto. Rezo para no tener necesidad de llegar a eso.

Tras despedirnos de los hermanos de Ascheradan proseguimos viaje para dirigirnos a (…)


***


Otra semana, otra sesión. Esta ha sido corta, pues tuvimos que interrumpir el juego mucho antes de lo acostumbrado. Además, fue una de esas en las que algo que, mientras preparaba la partida, el director de juego piensa que será resuelto con rapidez por los jugadores. Pero luego llega el momento, y resulta que la cosa se alarga, y se alarga, hasta que monopoliza toda la tarde. En este caso, el puñetero pukis.

El bichejo mantuvo en vilo la construcción del castillo, poniéndola seriamente en peligro. Se tardó bastante más de lo esperado en atraparlo, y cuando lo hicieron ya había causado daños suficientes como para añadir una estación adicional al tiempo de construcción. Pero al final acabaron con el condenado bicho.


Y ya no hubo tiempo para mucho más. Poco después de aquello, tuvimos que terminar la sesión. Tal vez en la siguiente.

4 comentarios:

  1. "Tiene pinta que el tal Adam cohabita mucho con esa bruja de Tekla, que es mujer, tentadora, hermosa y de carnes prietas.

    ¿Habrán hablado ya con Adam de los peligros de la carne?¿De los peligros de las mujeres hermosas? Mujeres causantes de nuestro sufrimiento, del pecado original que nos expulsó del paraíso. Ni siquiera estamos seguros de que tengan alma...

    Quizás con vino se pueda soltar la lengua de Zemvaldis y descubrir como es seguro que la hermosa Tekla, de generoso pecho, ha embrujado al bueno e inexperto Adam"

    Um, a Adam y a Tekla se les va a complicar la cosa. Sueno divertido. No sé pero me imagino al tal Peter pensando de manera parecida.

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  2. En realidad, el franciscano, que ya habló con Tekla, resultó ser menos cerrado de mente de lo que se podría esperar. Incluso tenían puntos en común, pues el patrón de la orden tenía ideas sobre la presencia del alma en los animales, o incluso en cosas inanimadas. Eso le da ciertos puntos en común con los practicantes de la romuva.

    Que no todos y cada uno de los curas va a ser un fanático de mente estrecha. Hasta en la vida real he conocido a alguno que se sale del estereotipo Rouco Varela.

    Lo de Adam y Tekla son maledicencias sin fundamento alguno, difamaciones maliciosas.

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    1. De hecho, la mayoría no son Rouco.

      Pero alguno habrá con mirada libidinosa que piense que Adam está cometiendo los pecados que él mismo cometería. Añadiendo a su pecado la envidia. Y todo por culpa de una mujer.

      Si no ¿quien difunde esos rumores? Aunque se me ocurre otra causante.

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    2. Nadie está difundiendo esos rumores. Te estás montando una película lasciva tú solo, Gilen. De lo que sí pueden estar soltando rumores es de que Adam haya pedido por mediación de Tekla la ayuda de sacerdotes paganos de la romuva para velar por el feudo de Ascheradan y sus gentes. Y serían rumores bastante fundados.

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